El secreto del Karma Yoga: actúa con desapegoFormación: Bhagavad Gita - Karma Yoga - Maestría en Bhagavad Gita Karma Yoga: Haz bien tú trabajo, con desapego y alcanzarás la liberaciónExplicación de Pedro Nonell en base a los comentarios de Swami Vivekananda y Swami Vidya Prakashananda sobre el verso 19 del capítulo 3 (Karma Yoga, Camino de la acción desinteresada) del Bhagavad Gita
En el verso 19 del capítulo 3 (Karma Yoga) del Bhagavad Gita, Krishna nos explica el secreto del Karma Yoga: “Por lo tanto haz siempre bien el trabajo que debe realizarse, y hazlo sin apego, porque realizando los deberes prescritos sin apego, el hombre alcanza al Supremo”. Como podemos observar en este verso clave del Bhagavad Gita, debemos actuar correctamente, de acorde con los Shastras y conforme a nuestro Dharma, y hacerlo totalmente desapegados mentalmente de los frutos de los resultados, actuando conforme al Nishkama Karma purificaremos nuestra mente. El Karma Yoga está abierto a cualquier creencia espiritual, para un hinduista su Shastra será el Bhagavad Gita, para un musulmán el Corán o para un Cristiano la Biblia. Si somos capaces de actuar así, el Karma Yoga se convierte en un camino de liberación (Moksha). ¡Qué maravilloso es el Karma Yoga! Simplemente actuando así en la vida, el camino de la acción desinteresada se convierte en un camino espiritual que permite al hombre liberarse del Samsara (ciclo nacimiento-muerte). Además, en otro verso del Bhagavad Gita, Krishna afirma que hace falta sólo un poco de este camino. Occidente debería incorporar esta antigua visión del trabajo, esa divinización del trabajo como decía Swami Vivekananda. Nuestro sistema actual, basado en buscar sólo el fruto de los resultados se ha implantado desde arriba en todas las áreas de las empresas: desde el Director General hasta el último de los trabajadores; y no está claro que este sistema sea el único posible. Bajo esta visión del trabajo, no serían necesarias ni patronales ni sindicatos, ni tantas asfixiantes leyes que ahogan cualquier iniciativa e innovación y que no hacen más que ir en contra de todos los implicados. El Tao Te King nos lo explica muy bien: “Cuantas más leyes, más ladrones” Este tema daría para escribir un ensayo, y no es el objetivo de esta reflexión, pero si la sociedad no es consciente de las ventajas que a todos nos aportaría, y que además podría ayudar a Occidente a levantarse de su larga agonía, será imposible convencer a los políticos para que redactasen leyes especiales para empresas que sigan el Karma Yoga. Pero no tengo ninguna duda, que algún día, quizás cuando el sistema vuelva a colapsar, que lo lograremos. Karma Yoga: el camino natural para la mayoría De los cuatro principales caminos del Yoga, el Karma Yoga es el camino más sencillo de seguir y por tanto el sendero más fácil y natural para la gran mayoría de la humanidad. Muy poca gente es capaz de seguir, y aun menos vivir, siguiendo el Jnana Yoga, el camino de la alta filosofía del Advaita Vedanta. Tampoco son muchos los que tienen la suficiente capacidad de meditación para realizar a Atman mediante el Dhyana Yoga. Si bien son más personas las que pueden seguir el Bhakti Yoga, es necesario tener ese sentimiento Bhakti innato, el cual no se aprende ni en libros e iglesias. Además, y como bien demostró Vivekananda, el Karma Yoga puede ser seguido, aunque es mucho más difícil por los agnósticos, y quizás seguramente por los ateos. Generalmente, entre los buscadores, muy pocos adoptan el Jnana Yoga o el Dhyana Yoga. La mayoría de las personas se inclinan naturalmente por el Karma Yoga y el Bhakti Yoga. Si nos fijamos, en el capítulo 2 del Gita se explica Atman a través de la filosofía del Sankhya Yoga, y más o menos a mitad de este capítulo empieza a explicar el Karma Yoga, y lo hará hasta el capítulo 5. A continuación el Dhyana, luego el Bhakti y finalmente el Jnana. Krishna nos proponer como una serie de escalones en nuestro camino espiritual, empezando por el más sencillo el Karma Yoga. Por ello se considera al Karma Yoga como el camino natural de evolución para la mayoría de la humanidad. Comentarios de Swami Vivekananda Swami Vivekananda decía “Trabaja, trabaja, trabaja”, quería compartir con vosotros un diálogo entre Swamiji y un discípulo: Discípulo: Pero, si uno tiene que renunciar a los frutos del trabajo, ¿por qué ha de ser inducido a emprender un trabajo que siempre es penoso? Swamiji: En esta vida humana, uno no puede evitar siempre no hacer algún tipo de trabajo. Cuando el hombre tiene que hacer algún trabajo forzosamente, el Karma Yoga le ordena que lo haga de tal manera que lo libere a través de la realización de Atman. También leemos esto en el Gita y aprendemos que tenemos que trabajar, trabajar constantemente con todo nuestro poder; poner toda nuestra mente en el trabajo, cualquiera que sea, lo que estamos haciendo. Al mismo tiempo, no debemos estar apegados. Es decir, nada más debe apartarnos del trabajo; aun así, debemos poder dejar el trabajo cuando queramos. Esa es la única causa de la desdicha: estamos apegados, estamos siendo atrapados. Por eso dice el Gita: Trabaja constantemente; trabajar, pero no estar apegado; no ser atrapado. Resérvate el poder de desprenderte de todo, por muy amado, por mucho que el alma lo anhele, por grandes que sean las aflicciones de miseria que sientas si fueras a dejarlo; aún así, resérvate el poder de dejarlo cuando quieras. Que bella y profunda reflexión de Vivekananda. Comentarios versos Karma Yoga (Bhagavad Gita 3)
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